En la categoría femenina, la gran ultramaratonista neozelandesa Anna Frost, lideró la prueba de principio a fin. Frosty demostró su superioridad y conocimiento del recorrido y no dejó que su victoria peligrara en ningún momento.
Por detrás, la única corredora que parecía capaz de poner en peligro la victoria de la kiwi era Emma Roca, que por momentos redujo ostensiblemente la ventaja y parecía poder optar al triunfo, pero finalmente este cayó del lado de Anna Frost, que paró el crono en un tiempo de 29 horas y 02 minutos, colocándose como octava posición en la clasificación absoluta.
Por su parte, Emma Roca se quedó con la segunda plaza, llegando a la meta con una marca de 29 horas y 36 minutos, llegando novena clasificada de la general absoluta.