MEJORA TUS ASCENSOS EN LA MONTAÑA

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Combina tus entrenamientos de ascensos largos con tramos cortos e intensos

Superar desniveles positivos implica una preparación previa y especifica durante los entrenamientos de montaña. Incluye sesiones específicas de ascensos largos, acostumbrando al cuerpo y a la mente al esfuerzo prolongado de carrera en ascenso, además de mejorar y asimilar el gesto técnico más adecuado para cada corredor y conseguir ser más eficientes y resistentes.

 Además, conviene incluir aquellos ascensos costos e intensos en los que hay que tener y encontrar la cadencia y amplitud de zancada más adecuada a cada uno.

Adaptarse adecuadamente para por el terreno corriendo o caminando, supondrá una gestión correcta de cada tramo de carrera y ahorraremos mucha energía.

Todo esto hay que estudiarlo y prepararlo previamente para no llevarnos sorpresas en carrera. La experiencia en montaña y el hecho de haber corrido en una variedad de terrenos (rocas, bosque, desierto, pista, sendero,…) jugarán a tu favor.

Una zancada adecuada te ayudará a ahorrar energía

Durante los entrenamientos conviene probar el tipo de zancada (corta/larga) y la cadencia de carrera más adecuada a tu estilo, fisonomía y características como corredor y al tipo de terreno sobre el que te desplazas. Hay ocasiones en las que conviene avanzar en subida con paso corto y cadencia alta.

Suelen ser tramos de ascenso corribles y en los que no conviene gastar excesiva energía en cada zancada pero mantener un ritmo vivo acompañado de un buen braceo y ritmo respiratorio.

Por el contrario, hay otras situaciones de mayor porcentaje en las que andar a grandes zancadas con la ayuda del impulso de manos en los muslos y cuerpo hacia adelante, te ayudan a gestionar esos tramos duros en los que correr supondrían un excesivo gasto energético y muscular. Combinar ambas formas de avanzar dependiendo del terreno te ayudarán a aprovechar tus cualidades personales y gestionar bien tu carrera.

Bracear a ritmo ayuda mucho a avanzar en los tramos de ascensos

El gesto técnico adecuado y bien entrenado condicionará un avance ligero y ajustado. Es conveniente tener una visión de la colocación de tus brazos y cuerpo para ser un corredor más eficiente. Imaginarte que vuelas sobre el terreno y avanzas ágilmente.

El impulso de los brazos ayuda notablemente en el avance de carrera en ascenso, tanto acompañado al ritmo como sobre los muslos en tramos duros. Juega con la colocación de tu cuerpo y analiza tus sensaciones, revisando de vez en cuando la colocación de brazos y tronco.

Graba tu forma de correr en los ascensos si quieres tener más detalles y mejorar

Intenta buscar el mejor terreno para avanzar en cada situación. En el caso de terrenos muy difíciles en ascenso fuerte busca la hierba, que te ayudará a aumentar la tracción y evitar resbalones que te hagan perder energía. Sobre terrenos muy técnicos de roca la agilidad y experiencia juegan un papel fundamental.

Procura entrenar de vez en cuando en terrenos con mucha roca, senderos lodosos, barrancos, ríos secos

Para de este modo ganar recursos que te ayuden a subir más ágil y rápido en estas situaciones. Las rocas y raíces ayudan a pisar sobre ellas de manera firme y avanzar seguro.

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