Notice: Undefined variable: fecha in /home/runcloud/webapps/runninglife/public/wp-content/plugins/sinetiks-anuncios/sinetiks-anuncios.php on line 345
Notice: Undefined variable: ads_fecha_inicial in /home/runcloud/webapps/runninglife/public/wp-content/plugins/sinetiks-anuncios/sinetiks-anuncios.php on line 345
En la presente edición 120° del Maratón de Boston, se celebran también los 50 años cuando, en 1966, Roberta Gibb con tan solo 23 años, realizo la proeza que rompió los esquemas para que por primera vez una mujer pudiera correr un maratón en la historia.
Inquiera, guerrera y corredora nata, desde su niñez en la secundaria tenia una gran vitalidad para recorrer entre 11 a 13 kilómetros diarios cuando jugaba hockey sobre pasto.
Cuando por primera vez vio el Maratón de Boston en 1964, se prometió entrenar con gran gallardía para participar en el maratón en algún momento de su vida. Así que el entrenamiento empezó a realizarse de forma mas extenuante y lo hizo durante 24 largos meses.
Roberta mando su solicitud para poderse inscribir al Maratón de Boston, pero se llevo la sorpresa que la Unión Atlética Amateur de Boston, le escribió las siguientes líneas de forma textual: “Esta es una carrera exclusiva para la rama masculina. No se admiten mujeres, y además no son físicamente capaces”.
Lamento rotundamente lo que la Asociación le hacia saber al no poder participar, por lo que dichas palabras la indignaron. En esa época las mujeres tenían una serie de limitaciones que no podía florecer en el ámbito social y laboral, lo que las ponía en una posición indefensa para obtener sus propios derechos, pocas inclusive lograban terminar la universidad, colocar un negocio, vivir solas ni de locas y correr, también.
Roberta Gibb, tomo la determinación de correr el maratón, sin tomar en consideración lo que le decía la Unión Atlética Amateur de Boston. El día de la competencia tuvo que correr con unas bermudas de su hermano y una sudadera para disfrazarse. Tomo la decisión de calentar unas cuantos kilómetros previo al maratón, se coloco atrás de unos arboles y estaba lista para incorporarse al grupo del maratón, así no sería tan fácil detenerla y ser descubierta por la organización.
Cuando dio inicio el maratón, dejo que avanzaran los corredores elite para que pudiera incorporarse con los corredores promedio. Conforme avanzaba el evento muchos corredores se dieron cuenta que se trataba de una mujer corriendo, ella les comento que no quería que la sacaran y ellos mismo respondieron que no lo permitirían.
Durante los primeros 30 kilómetros llevo un buen ritmo, que de haberlo continuado pudiera haber terminado el maratón en menos de tres horas; pero le faltaba azúcar, su entrenador le recomendo no comer nada, por que podría causarle algún malestar.
Los últimos 10 kilómetros para Roberta fueron de mucha fuerza, tras ya llevar ampollas y calambres, no paro, para ese periodo del evento ya la mayoría sabía que estaba una mujer corriendo en el maratón. Nadie la detuvo, siguió corriendo, a pesar que le faltaban dos kilómetros y estaba desvaneciéndose, lo que ella misma le confirmo que no podía detenerse por que así demostraría que las mujeres son físicamente capaces para correr un maratón, eso la impulso hacia la meta con un crono de 3 horas, 21 minutos y 40 segundos, fabuloso tiempo para ser su primera vez.
Por su decisión y garra, Roberta Gibb, pasó a la historia como la primer mujer en lograr acabar el Maratón más antiguo del mundo, al demostrar que las mujeres tienen la capacidad para hacer del deporte también su estandarte, nada te detiene.
Comentarios