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El running es una actividad física intensa que protege nuestro corazón. Investigaciones han demostrado que existe una relación inversa entre la actividad física y el riesgo de una enfermedad cardíaca. Sin embargo, esta comprobado que las personas sedentarias tienen el doble de riesgo de sufrir un infarto.
Adicional a esto el ejercicio siempre debe ser realizado de forma vigorosa para que realmente pueda protegernos de afecciones cardiovasculares, jamás exagerada, ojo, hay una gran diferencia entre forma vigorosa y exagerada, para que lo tengamos claro, de forma vigorosa, se entiende como todo ejercicio que se realiza de forma constante a un ritmo aceptable para el deportista y de forma exagerada, se entiende como todo ejercicio que se realiza sin forma, sin ritmo y se llega a un umbral alto del cuerpo del deportista sin medir las consecuencias.
Esta comprobado bajo investigaciones supervisadas durante 10 años, mediante 1,700 casos de enfermedades coronarias, que el correr es totalmente saludable, pues se arrojaron datos valiosos en donde se determinó que los hombres que corrían al menos una hora a la semana tenías una reducción del riesgo de padecer alguna enfermedad del corazón del 42%. Inclusive un ejercicio más ligero como caminar a paso rápido permite una reducción del riesgo del 18%.
Lo impresionante de dichos datos, es que el corazón es una maquina natural tan perfecta que bajo las condiciones que nosotros mismos le demos para que trabaje de forma adecuada o inadecuada, según sea el caso de la condición de cada corredor, dependerá de mucho de la calidad de ejercicio que realice, la alimentación y buenos hábitos que mantenga; por ello es relevante que todo corredor o corredora, se realice estudios del corazón por lo menos una vez al año para saber la condición real en la que nos encontramos para seguir corriendo.
